PREDICADOR: Rev. Margaro Figueroa / Oficial Internacional
TEMA: Comprometidos con la Palabra
CITA BÍBLICA: Josué 24:15
Muchas veces salimos de una convención sin tener claro lo que Dios quiere con nosotros y aunque la palabra es buena, no queremos comprometernos hasta que Dios no nos hable.
Pero hoy Dios nos va a hablar claro. A veces sentimos desilusión cuando vemos que Dios llama a unos y a otros, pero a uno no le habla.
Quien no se compromete no logra nada.
Durante nuestra vida adquirimos compromisos: Matrimoniales, financieros, laborales, etc.
En un matrimonio un hombre y una mujer hacen un compromiso, que al pasar el tiempo puede desvirtuarse, sino se cuenta con la ayuda del Espíritu Santo.
El creyente tiene que tener en su corazón el amor por salvar las almas, para esto hay que estar comprometidos con y por estas almas.
Hoy nadie quiere hacer compromisos, las generaciones nuevas no quieren comprometerse.
Dios nos tiene en esta convención preparándonos, capacitándonos, porque hay muchas vidas que necesitan nuestro compromiso.
Es peligroso cuando rompemos nuestros compromisos con Dios.
En Deuteronomio 32:49 Dios declara su compromiso con Moisés, pero este por su desobediencia en la peña, altero el compromiso, por ello Dios busco a otra persona que pudiera comprometerse; Dios le dice entonces a Josué: Mi siervo Moisés murió, así que levántate; así nos dice el Señor hoy, la hora de la prueba ya pasó, levántate.
Empieza a hacer pacto con Dios, empieza a comprometerte con Dios. Mientras Moisés vivió, Josué no se sintió defraudado o desilusionado, sino que aprendió de él, y no cometió los errores que este tuvo en vida.
Podrá sentirse Ud. hoy como se sintió Josué cuando Dios le dijo: Nadie te hará frente en los días de tu vida.
Quieres ser bendecido mantén la palabra pura, mantén la palabra sana, como le dijo Dios a Josué nunca se apartara de tu boca este libro de la ley.
Nosotros que estamos en la espera del llamado de Dios, debemos mantener los principios de la palabra, lo que se nos ha enseñado, en otras palabras Dios necesita gente comprometida.
Dios tiene sus planes, y se cumplen pase lo que pase.
En 1 Reyes 2:1, hay un hombre que paso por lo mismo que Moisés, David le dice a Salomón, rindo hoy mis compromisos, sigo el camino de los que mueren, pero sobre tus hombros queda una carga fuerte, esfuérzate y se hombre.
Aquí hay hombres y mujeres, jóvenes y jovencitas que le dicen a Dios: me voy a esforzar más de lo que estoy haciendo para ayudar en el crecimiento de la obra.
Dios no puede ser burlado, todo lo que el hombre sembrare eso segará.
Muchos no quieren comprometerse, pero tenemos que pagar un precio por la separación con el mundo, a muchos le gustan los beneficios y no quieren adquirir compromisos.
Empieza a comprometerte con la palabra de Dios.
Dios no incumple sus promesas, somos nosotros los que le fallamos al Señor.
La iglesia tiene que comprometerse con la predicación de la palabra; este compromiso es caro, pero es más lo que se gana que lo que se pierde.
Cuando hablamos el lenguaje de Dios y tomamos decisiones, que aunque van a costar caro, recibiremos bendición.
Arregla tus asuntos con Dios, hay que hacer un inventario, negocia con Dios, nosotros sabemos lo que nos esta impidiendo comprometernos con Dios.